martes, 10 de marzo de 2009

¿Investigacion , para que?



Parece que se esta poniendo de moda el tema de las investigaciones por doquier por cualquier cosa, y si se tuerce el tema, pues se para, y no pasa nada. Los ciudadanos estamos tan acostumbrado a la corrupción y entretelas políticas que las damos por validas sin levantar grito al cielo.Porque Serra.
Estamos tan atomizados que parecemos zombis viviente.Ahora eso si, si osa quitarnos un solo euro, es enemigo para siempre, se la juramos, y en cuanto tengamos la ocasión se la devolveremos con creces. Sobre todo no faltan descalificaciones y conjuras. Asi es la política. Me apena, pero eso no siempre es cierto. Hay mucha gente que siente su pertenencia a la política como un medio para resolver injusticias y miserias desde sus humildes puestos, aunque también por las componedas económicas y sociales.
Me sorprende el giro corpeniano que se ha tomado la Presidenta Aguirre en dar por cerrado el caso de los Espías en Madrid. Para que investigar, si eso podría llevarse por delante muchos de los privilegios y prebendas, mejor pararla hasta que acampe el temporal, pero se abrirá otro frente no menos virulentos, que es la opinión publica, aunque manejable, tiene memoria y posiblemente la judicial y esa si que no podrá pararla. Se sabia de antemano que no llegaría a su fin, esta la comisión muy politizada y la fuerza de la mayoría esta para realizar el paripé de la paralización de las investigaciones. Hasta aquí hemos llegados.
En muchos estamentos de la sociedad, si se trata de averiguar hechos que podría ser delictivos, de ser ciertos, solo podría paralizarlo la corrupción, dinero y poder político, los demás difícilmente podríamos eludir las investigaciones fiscales o de cualquier otras historias.
Solo los ricos y poderosos pueden permitidse la paralización de sus casos de aperturas de investigaciones, bien con un ejercito de abogados, con dilaciones y artificios jurídicos, otros con meras bajas medicas, en muchos casos extinguiendo la causa por caducidad o prescripción. Los más por silencio favorecedor. Es una vergüenza ajena, pero es la verdad que yo percibo, y quiero estar equivocado pero no encuentro pruebas que indique lo contrario.Asi es la vida.

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